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Para ti, mi mejor amiga

viernes, 18 de julio de 2008

Toma mi mano - Belanova 

Me baja como una especie de melancolía cuando escucho esta canción y me pongo a pensar. Cuántas cosas hemos pasado, cuántas tristezas, alegrías... Esas espasmódicas risas, tan lejanas y tan cercanas. Nos reíamos tanto que nos llegaba a doler el estómago.. y luego nos miraban como locas. Y de pura melancolía me pondría hasta llorar.. y si me preguntan el porqué, no sabría que decir.. sólo lo haría porque es una canción muy melancólica y me hace pensar que si llegas a estar en una situación que te acongoje, yo estaré ahí para ti, Catita, por siempre.

Toma mi mano

ya todo estará bien,

no debes llorar.

Sé que es difícil,

pero yo estaré aquí.

No te sientas sola.

Si todo está mal

y no puedes más, 

puedes buscarme.

Sé que tú en mi lugar,

lo harías también, 

sin pensarlo.

Sé que duele caer.

Yo hoy estoy aquí para ti

como ayer, como hoy,

sabes que puedes buscarme.

Sé lo que sientes

y aunque parezca así:

No es el final.

Esto no es fácil,

pero yo estaré aquí.

No te sientas sola.

Sé que tú en mi lugar

lo harías también,

sin pensarlo.

Sé que duele caer.

Yo hoy estoy aquí para ti

como ayer, como hoy,

sabes que puedes buscarme.

Y me recuerda esa conversación telefónica de hace unos días, y la canción lo expresa muy bien. Y debería agregar un para siempre.

"Yo hoy estoy aquí para ti como ayer, como hoy, sabes que puedes buscarme."

Teoría del "Mismo"

martes, 1 de julio de 2008

Estábamos con mis compañeras en el gimnasio, a punto de dar la prueba de basquetboll de bandeja y estabas casi alterada porque la última vez, habías tirado todo correctamente, pero solo habías encestado una vez y eran siete, ¡siete!. 

Así que me auto-inspiré confianza y ahora que somos más seguras de quienes somos contamos cada paso: "derecha, izquierda, derecha, izquierda... derecha, izquierda, arriba y..." ¡encesta!. Ahora sí que estabas segura e inventaste hasta un baile de la victoria y llegabas saltando al lado de tus compañeras y amigas. En una de esas ves a una de tus mejores amigas al borde máximo de la desesperación, porque estaba de mal... en peor.

Bondadosamente te acercaste y dijiste: "Maureen, tú puedes".

A la siguiente: "Vamos, piensa... 'Misma, tú puedes'... "

Y ella se fue repitiendo la frase hasta que le tocó y mágicamente funcionó.

Tu teoría fue rápidamente difundida entre tus pares cercanas, osea tus amigas. 

Hasta que a la semana siguiente, en la segunda oportunidad, una de ellas se te acercó con una sonrisa radiante y dijo:

"Funciona"

Ahora, suerte a ti, a mí y a ellos. 

"Misma, tú puedes"